sábado, 28 de mayo de 2011

El Islam y la Tolerancia Religiosa

Conferencia pronunciada en diciembre de 1985, en la Universidad de Milán

Sheij Ahmad Kutfaro


En el nombre de Dios, el Clemente, el Misericordioso.

Queridos hermanos y hermanas, os saludo con el saludo del Islam, "As-salam alaikum", (Que la Paz sea con Vosotros), que representa el sincero esfuerzo de los creyentes por extender el amor y la tolerancia entre la gente, sea cual sea su idioma, creencia o sociedad.

Malentendidos comunes acerca del Islam

Me gustaría empezar hablando sobre algunas ideas erróneas que han oscurecido el camino del entendimiento, de muchos cristianos y occidentales, sobre el Islam. Muchos creen que el Islam se extendió por medio de la espada y que el Islam es sinónimo de opresión, coerción y ausencia de los derechos y libertades básicas. Aún más, muchos países occidentales hacen valer como sinónimos del Islam la intolerancia y el extremismo e incluso muchos intelectuales de países no musulmanes, sus políticos y autoridades religiosas, han insistido en seguir aferrados a esta visión negativa y errónea.

Este estereotipo debe desaparecer y se debe mostrar a los occidentales de forma clara y sincera lo que es el Islam.

El Islam nos exige examinar cualquier asunto detenidamente antes de llegar a una conclusión. Dios dice en el Corán:

"¡Vosotros que creéis! Si alguien, que no es digno de confianza, os llega con una noticia, aseguraos antes; no vaya a ser que, por ignorancia, causéis daño a alguien y tengáis luego que arrepentiros de lo que hicisteis"

(Sagrado Corán 49:6)

El Islam y el Espíritu de la Tolerancia Religiosa

Así como el monoteísmo es la base del Islam, la tolerancia es una de sus características más importantes. El Islam significa, literalmente, sumisión a Dios y paz. La tolerancia religiosa ha sido siempre una ley necesaria para la vida, una ley que no se puede rechazar sin amenazar la existencia de la humanidad; permítanme ofrecerles, queridos hermanos y hermanas, sólo unos cuantos ejemplos del espíritu de tolerancia que reside en el corazón del Islam.

Primero: El Islam establece de forma clara, que toda la humanidad no es sino una gran familia y que su origen es uno ya que todos los seres humanos fueron creados de una sola alma. Dios dice en el Sagrado Corán:

"¡Hombres! Temed a vuestro Señor que os creó a partir de un solo ser, creando de él a su pareja y generando a partir de ambos muchos hombres y mujeres"

(Sagrado Corán 4:1)

En la medida en que todo el mundo forma parte de la familia de Dios, el Islam insiste en que debe haber igualdad y respeto absoluto entre todos los seres humanos. La raza, el color, la etnia o los privilegios terrenales no pueden ser la medida de valor en el Islam, esta medida es sólo la rectitud. En el Sagrado Corán, Dios se dirige a la humanidad con estas palabras:

"¡Hombres! Os hemos creado a partir de un varón y una hembra y Os hemos hecho tribus y pueblos distintos para que os reconocierais unos a otros. Y en verdad que el más noble de vosotros ante Dios es el que más Le teme. Dios es Conocedor y está perfectamente informado."

(Sagrado Corán 49:13)

La variedad de seres humanos y la diversidad es vista en el Islam como parte de las bendiciones y la generosidad de Dios. Lo que debe hacer la gente, es ir más allá de la mera coexistencia buscando, de forma activa, el entendimiento mutuo y la cooperación. El Profeta Muhammad nos enseñó que toda la humanidad debe ser considerada como parte de la familia de Dios y que a quienes más ama Dios es a aquellos que son más beneficiosos para los miembros de Su familia.

Segundo: El Sagrado Corán insiste en este concepto de justicia que no está limitado por la raza, el color o la nacionalidad. Dios dice:

"Dios os ordena devolver los depósitos a sus dueños y que cuando juzguéis entre los hombre lo hagáis con justicia. ¡Qué bueno es aquello a lo que Dios os exhorta! Es cierto que Dios es Quien oye y Quien ve"

(Sagrado Corán 4: 58)

Dios va más allá cuando dice:

"¡Vosotros que creéis! Sed firmes en favor de Dios, dando testimonio con equidad. Y que el odio que podáis sentir por unos, no os lleve al extremo de no ser sinceros. ¡Sed justos! Eso se acerca más a la temerosidad. Y temed a Dios, es cierto que Él conoce perfectamente lo que hacéis"

(Sagrado Corán 5:8)

Tercero: El Islam es universal por naturaleza y abarca todos los mensajes divinos y religiones previas. Así, tal como Dios es Uno, también lo es el mensaje de fe esencial que Él envió a todos Sus profetas y mensajeros. El Sagrado Corán dice:

"Os ha legislado dentro de la práctica de Adoración, lo que encomendó a Noé, lo que te hemos inspirado a ti y lo que encomendamos a Abraham, Moisés y Jesús: que establecierais firmemente la práctica de adoración y no os dividierais en ella."

(Sagrado Corán 42:13)

En el Islam, la unicidad de Dios implica la unidad entre la verdadera creencia y la religión. El mensaje básico que se le confió a todos los profetas es intemporal y universal: llamar a la humanidad a la adoración de Dios únicamente. Dios dice claramente en el Corán que la gente de fe, aquellos que se someten a Dios y a Su verdad, verán claramente la unidad de los mensajeros de Dios, de sus respectivas revelaciones y las aceptarán todas:

"El Mensajero (Muhammad) cree en lo que se ha hecho descender procedente de su Señor, y con él los creyentes. Todos creen en Dios, en Sus ángeles, en Sus libros y en Sus Mensajeros, "No aceptamos a unos mensajeros y negamos a otros". Y dicen: "Oímos y obedecemos, (danos) Tu perdón Señor nuestro y hacia Ti es el regreso."

(Sagrado Corán 2:285)

La tolerancia religiosa es una parte constituyente del Sagrado Corán mismo: en el corazón del Corán están todas las enseñanzas esenciales de la Torá de Moisés y del Evangelio de Jesús (incluidos algunos milagros suyos que no aparecen en los evangelios). Dios dice en el Sagrado Corán:

"E hicimos que te descendiera el Libro con la verdad, como confirmación de lo que había en el Libro y para preservarlo;"

(Sagrado Corán 5:48)

El Sagrado Corán contiene los consejos y la historias de las vidas de muchos profetas bíblicos, que Dios describe así:

"Hay, en sus historias, consejos para la gente dotada de entendimiento… una confirmación (de las escrituras) que vinieron después, una exposición detallada de todas las cosas, una guía y una misericordia para los que creen"

(Sagrado Corán 12:111)

Cuarto: El Islam afirma que existe un lazo especial entre los musulmanes, los judíos y los cristianos. Los judíos y los cristianos son mencionados como "la gente del Libro" en el Sagrado Corán, haciendo referencia a la gente de la Torá y los Evangelios. Los judíos los cristianos y los musulmanes son vistos como familiares, cuyas creencias están basadas en las escrituras reveladas y quienes comparten la tradición profética. En particular, el Sagrado Corán hace énfasis en la cercanía entre los seguidores del cristianismo y del Islam.:

"Encontrarás que los que están más próximos en afecto a los que creen son los que dicen: "Somos cristianos" ".

(Sagrado Corán 5:82)

En el Sagrado Corán Dios ordena a los musulmanes (y de hecho a todos los creyentes sinceros) creer en Jesús, Moisés y todos los profetas bíblicos, que fueron enviados como misericordia para la humanidad:

"Decid: "Creemos en Dios, y en lo que se hizo descender a Abraham, Ismael, Isaac, Jacob y las Tribus, y lo que se le dio a Moisés y a Jesús y en lo que le fue dado a todos los profetas procedente de su Señor. No hacemos distinciones entre ellos y nos postramos ante Dios"

(Sagrado Corán 2:136)

La tolerancia del Islam no se limita a la "Gente del Libro", sino que se extiende a todos los creyentes sinceros y amantes de la verdad. Dios afirma en el Sagrado Corán:

"Cierto que los que han creído, los que siguen el judaísmo, los cristianos y los sabeos, si creen en Dios y en el Último Día y actúan rectamente, tendrán su recompensa ante su Señor y no tendrán que temer ni se entristecerán".

(Sagrado Corán 2:62)

Los creyentes sinceros de todas las religiones, de hecho, forman la comunidad de los justos, y Dios extiende Su gracia sobre ellos con justicia:

"Es verdad que a los musulmanes y a las musulmanas, a los creyentes y a las creyentes, a los obedientes y a las obedientes, a los veraces y a las veraces, a los pacientes y a las pacientes, a los humildes y las humildes, a los que dan con sinceridad y a las que dan con sinceridad, a los que ayunan y a las que ayunan, a los que guardan sus partes íntimas y a las que las guardan, y a los que recuerdan mucho a Dios y a las que recuerdan; Dios les ha preparado el perdón y una enorme recompensa".

(Sagrado Corán 33:35)

Quinto: El Islam afirma inequívocamente el derecho de cada individuo a la libertad de pensamiento y religión. Si alguien se toma el tiempo necesario para leer el Corán y estudiar la vida del Profeta Muhammad, la paz sea con él, y la de sus compañeros, descubrirá que ellos construyeron una sociedad basada en el amor, la misericordia, la justicia y la hermandad. También encontrará que su aceptación del Islam fue resultado del uso de su razón y convicción, y no de la violencia, la compulsión o la opresión. El Sagrado Corán ordena:

"No hay compulsión en la religión, la verdad se mantiene claramente diferenciada del error. Quien rechaza el mal y cree en Dios se ha sujetado al asidero más seguro, que nunca falla"

(Sagrado Corán 2:256)

El Islam insiste en que la gente, no sólo los musulmanes, debe disfrutar de la libertad de religión y adoración, considera los lugares de adoración son sagrados, sean éstos judíos, cristianos o musulmanes, y pide a los musulmanes que defiendan esta libertad de culto para todos. El Islam busca el establecimiento de una sociedad libre y universal en la cual todos puedan vivir disfrutando de la libertad religiosa a salvo y en igualdad. Dios dice:

"Si Dios no se hubiera servido de unos hombres para combatir a otros, habrían sido destruidas ermitas, sinagogas, oratorios y mezquitas, donde se menciona en abundancia el nombre de Dios. Es cierto que Dios ayudará a quien Le ayude."

(Sagrado Corán 22:40)

Sexto: Otro punto importante dentro de la tolerancia religiosa del Islam es la idea de que, donde existan diferencias de credo, sus seguidores deben relacionarse los unos con los otros sobre la base del respeto mutuo y la amabilidad. El Islam invita a los musulmanes a conducir este diálogo, y también las disputas, sobre asuntos religiosos, con un espíritu de amabilidad, sensibilidad y buenas intenciones y nunca con hostilidad o violencia. Dios dice en el Sagrado Corán:

"Y no discutas con la gente del Libro sino de la mejor manera"

(Sagrado Corán 29:46)

El reconocimiento de que Dios es el Señor de todo, el Único Juez y el Conocedor de todo, es la razón por la que los musulmanes llevan sus discusiones con amabilidad:

"Llama al camino de Tu Señor por medio de la sabiduría, la buena exhortación y una bella prédica".

(Sagrado Corán 16:125)

Incluso cuando se enfrentan a gentes que son hostiles a su fe y a ellos mismos, los musulmanes deben tomar el camino de la bondad, la paz y la unidad y responder con paciencia y amabilidad. Dios se dirige a los creyentes de la siguiente manera:

"No son iguales la bondad y la maldad; responde con la mejor actitud y aquel con el que tenías enemistad se convertirá en un amigo ardiente"

(Sagrado Corán 41:34)

La tolerancia del Islam en la práctica: algunos ejemplos históricos

Incluso una mirada superficial sobre la historia temprana del Islam nos descubrirá ejemplos remarcables de la tolerancia islámica. Voy a presentar aquí sólo unos pocos, como ejemplos útiles de armonía interreligiosa y para empezar a recorrer el largo camino de desmentir la creencia común de que el Islam es intolerante y de que está compuesto por un grupo de extremistas. Durante su vida como hombre de religión y jefe de estado, el Profeta Muhammad, la paz sea con él, mostró una gran sensibilidad y respeto en su trato con la "gente del Libro", es decir, con los cristianos y los judíos. Siguiendo el espíritu de la revelación, del Sagrado Corán que le había sido confiado, el Profeta Muhammad prohibió dañar a los no musulmanes y pidió a los musulmanes que los tratasen bien. Dijo una vez: "quien dañe a un cristiano o a un judío será mi enemigo en el Día del Juicio".

Lo primero que hizo el Profeta Muhammad, la paz sea con él, después de entrar en Medina, a la que había sido invitado como su líder, fue cerrar un pacto entre los musulmanes y las "gentes del Libro" de esa ciudad. En este tratado se acordó que los musulmanes garantizarían la libertad de creencia y los mismos derechos y deberes que a los musulmanes. Cuando una delegación de cristianos de Abisinia llegó a Medina, el Profeta, la paz sea con él, los llevó a la mezquita y se hizo cargo personalmente de ellos. Luego de servirles la comida les dijo que habían sido tan amables y generosos con sus compañeros, que habían emigrado con anterioridad a Abisinia, que no podía hacer menos que honrarles él mismo.

Cuando llegó a Medina la delegación cristiana de Najran, en el suroeste de Arabia, el Profeta los recibió en la mezquita y los invitó a hacer sus oraciones en la mezquita. Los musulmanes, junto al Profeta, rezaron en una parte de la mezquita y los cristianos en la otra; durante su visita, el Profeta discutió muchas ideas con ellos, de forma educada y amable.

Los sucesores del Profeta continuaron aplicando esta política Coránica de tolerancia religiosa. Cuando Umar ibn Al-Jatab, el segundo califa, liberó a Jerusalén de la ocupación Romano-bizantina, aceptó las condiciones que le pedían los habitantes cristianos; incluso, durante su estadía en esa ciudad, una vez, en la que Umar estaba dentro de la iglesia más importante de Jerusalén, llegó el tiempo de la oración de la tarde, los cristianos le ofrecieron hacer las oraciones en la iglesia, pero él los rechazó, por miedo a que los musulmanes de generaciones futuras confiscaran la iglesia para hacerla una mezquita.

Cuando una mujer copta, una secta cristiana de Egipto, vino a Umar quejándose de que el gobernador musulmán Amr ibn al-As había tomado su casa para añadir su terreno a una mezquita que se estaba construyendo al lado, Umar le preguntó al gobernador sobre el tema y Amr le dijo que el número de musulmanes había crecido tanto que necesitaban ampliar la mezquita. Amr le explicó que le había ofrecido a la mujer una gran cantidad de dinero, pero que lo había rechazado y que había dejado el dinero en un fondo, para que ella lo tomase cuando quisiese. Y aunque muchas leyes modernas permiten este tipo de procedimiento, Umar no lo aceptó por ir en contra de los principios islámicos y ordenó a los musulmanes que detuviesen la expansión y reconstruyesen la casa de la mujer cristiana tal como era antes.

La Jizya, el impuesto que los no musulmanes debían pagar en los territorios musulmanes a cambio de protección militar y de otros beneficios que les ofrecía el estado, ha sido otro tema que ha causado malentendidos. Cuando los musulmanes se dieron cuenta que habían sido vencidos en la ciudad de Homs y de que no podían garantizar por más tiempo la protección a los cristianos, les devolvieron la Jizya. Los musulmanes, de hecho, pagan un impuesto llamado Zakat que es muchas veces más grande que la Jizya.

Un día Umar ibn al-Jatab vio a un hombre pidiendo limosna en la calle y preguntó quién era ese hombre y le dijeron que era un judío. Umar lo tomó de su mano y lo llevó a su casa, le alimentó y le dio dinero y lo mandó al Tesoro de los musulmanes, diciendo, "dadle a este hombre del dinero de los musulmanes. ¿Acaso está permitido tomar su dinero (Jizya) cuando era joven y negárselo cuando es mayor? Eso no es posible en el Islam.

El hijo del gobernador de Egipto corrió una carrera de caballos con un cristiano copto y el cristiano ganó. Enfadado, el hijo del gobernador le golpeó con su látigo. El hombre trajo su caso a Umar en el periodo del Hajj (el peregrinaje anual de los musulmanes) y, en frente de todos los musulmanes, Umar ibn al-Jatab le dio el látigo al copto, diciéndole, "golpea al hombre que te golpeó". Entonces Umar se dirigió a Amr, el conquistador de Egipto diciéndole "¿Cómo se puede hacer esclavo a alguien que ha nacido libre?".

Los cargos en los estados islámicos se le daban a los mejor calificados, independientemente de sus creencias u orígenes. Por ejemplo, ibn Athal, el médico cristiano, fue el doctor privado de Muawiya, el fundador del estado Omeya. Otro califa Omeya, Abdul Malik ibn Marwan, puso a dos cristianos, Atanasio e Isaac, en las posiciones más altas de Egipto. Adud al-Dawla, el califa Abbasí, hizo a Nasr ibn Harun, un cristiano, su primer ministro y le dio autoridad sobre Irak y el sur de Persia.

El Islam garantiza a los no musulmanes sus derechos, junto a los de los musulmanes, entre ellos el derecho a la vida, a la libertad y a la propiedad. El Profeta Muhammad, la paz sea con él, dijo: "Quien maltrata a un no musulmán o le impone cargas superiores a las que puede soportar, me encontrará como su enemigo". El Islam permite a los no musulmanes a vivir en tierras musulmanas con respeto y honor, lejos de imponer segregación, les permite participar completamente en la sociedad islámica y participar en las actividades de los musulmanes, de acuerdo a lo que establece Dios en el Corán:

"Hoy se os hacen lícitas las cosas buenas. Y es lícito para vosotros el alimento de los que recibieron el Libro, así como el vuestro lo es para ellos. Y (son lícitas para vosotros) las mujeres libres y honestas que sean creyentes, así como las mujeres libres y honestas de los que recibieron el Libro antes que vosotros."

(Sagrado Corán 5:5)

Esperanzas en el Futuro

Los días en los que la humanidad podía simplemente aceptar la ignorancia y la imitación ciega se fueron para siempre. Es el tiempo del conocimiento, la luz y la verdad. Un tiempo en el que la humanidad sólo acepta las cosas de acuerdo con la razón, la lógica y la evidencia científica. La humanidad ha llegado a un alto nivel de progreso científico y lujos materiales, lejos de lo imaginable por las gentes de tiempos pasados. Sin embargo, la humanidad está amenazada por la destrucción desde dos perspectivas: la espiritual y la física. En último término, los problemas de la civilización moderna se deben a su indiferencia frente a Dios y frente a la guía espiritual que él ofrece a todos. Dios ha enviado a Sus mensajeros y profetas a través de los tiempos como un regalo de Su parte, para guiar a la humanidad a la felicidad y al éxito. En el Corán, Dios dice al Profeta Muhammad:

Y no te hemos mandado sino como misericordia para toda la humanidad".

(Sagrado Corán 21:107)

Los mensajes de Dios, a través de los siglos, han aconsejado a la gente vivir como una familia, en amor y tolerancia. Esta es la única forma de vida a través de la cual la humanidad puede asegurarse y disfrutar de las gracias de Dios y al mismo tiempo de los frutos del progreso moderno. Si la humanidad hubiese llevado a su corazón la esencia de las revelaciones divinas, no habría sufrido el infierno de las dos últimas Guerras Mundiales y no estaría al borde del desastre nuclear o de la destrucción del medio ambiente.

Los hombres y las mujeres de fe deben despertar, abrir sus ojos, y empezar a mirarse los unos a los otros a través de lentes que acerquen las cosas y no a través de unos que las alejen. La paz verdadera sólo se puede conseguir si estamos unidos bajo el estandarte de Dios y Sus mensajeros, y nos unimos en hermandad y cooperación, para construir una fe racional para la gente del presente y de las generaciones futuras. Si pudiéramos encontrar el coraje suficiente para hacerlo, los seres humanos podrían vivir un paraíso terrenal mientras esperan por el paraíso eterno.

Es el momento para que nuestras naciones cooperen con amor y generosidad y se unan en la adoración del Único Creador del universo, el Más Compasivo, el Más Misericordioso. Al hacerlo, reviviremos y realizaremos las enseñanzas de los profetas, de una forma consistente con las realidades de la civilización moderna, cooperando en las cosas en las que estamos de acuerdo y debatiendo de manera fraternal en las que diferimos.

Que Dios nos guíe hacia el bien, para buscar la verdad sin prejuicios ni ambiciones terrenales, con el espíritu del amor, la tolerancia y la hermandad. Todas las alabanzas y gracias son para Dios, el Señor del universo.

Que la Paz sea con todos Vosotros.

Conferencia pronunciada en diciembre de 1985, en la Universidad de Milán, Italia, por el sheij Ahmad Kuftaro, que fue Gran Mufti de Siria y presidente del Consejo Supremo de Fatwa.

Fuente: webislam

martes, 24 de mayo de 2011

LOS PILARES DEL ISLAM


Los cinco pilares del Islam son la esencia misma de la vida de un musulmán: El testimonio de fe, la Oración, dar el Zakat (Ayuda a los pobres), ayunar durante el mes del Ramadán y la peregrinación a la Meca una vez en la vida para aquellos que tengan las posibilidades de hacerlo.

1) El Testimonio de Fe:


El testimonio de fe consiste en decir con fe y convicción "la Ilaha illa Allah, Muhammad rasúl Allah" esto significa: "No existe dios verdadero sino Allah,1 y Muhammad es el mensajero de Allah". La primera parte del testimonio significa que nadie tiene derecho de se adorado sino Dios y que Dios no tiene ni socios, ni hijo. Este testimonio de fe es llamado la "Shahadah", una formula simple que deberá ser dicha con convicción para convertirse al Islam (como fuera explicado anteriormente en esta página). El testimonio de fe es el más importante pilar del Islam.

2) La oración:

Los musulmanes rezan cinco oraciones diariamente cada oración no dura más que unos cuantos minutos en ser realizada. La oración en el Islam es la conexión directa entre Dios y el creyente. No existen intermediarios entre Dios y el creyente.

En la oración, la persona siente una paz interior, felicidad, que se reconforta, y que Dios está complacido con ella o él. El profeta dijo, {"¡Oh, Bilal! Confortadnos con la oración.}2 Bilal era uno de los compañeros del Profeta que estaba encargado de llamar a la gente para la oración.

Las oraciones son realizadas en el amanecer, al medio día, la media tarde, el ocaso y la noche. El musulmán puede realizar la oración en casi todo lugar, tal como campos, fabricas, oficinas, universidades, etc.

3) Dar el Zakat (Ayuda para los necesitados):

Todas las cosas le pertenecen a Dios, y la riqueza por lo tanto ha sido colocada en las manos de los seres humanos tan solo para que la administren. El significado original de la palabra Zakat es "purificación" y "crecimiento". Dar el Zakat significa "dar un porcentaje especificado sobre ciertas propiedades a ciertas clases de gente necesitada". El porcentaje, que se hace obligatorio sobe el oro, la plata y el dinero en efectivo que haya alcanzado la cantidad (o el equivalente en dinero en el caso del efectivo) aproximada de 85 gramos de oro y que no haya sido utilizado en el transcurso de un año lunar, es del 2.5 por ciento. Nuestras posesiones son purificadas al reservar una pequeña porción de nuestros ingresos para los necesitados, y al igual que al podar un árbol, el corte equilibra y motiva un nuevo crecimiento.

Una persona podrá también dar tanto como quiera a manera de limosna o caridad.

4) Ayunar el mes de Ramadán:

Cada año durante el mes (lunar) de Ramadán,3 todos los musulmanes ayunan desde la salida del sol hasta la puesta del mismo, absteniéndose de comer, beber y tener relaciones sexuales.

A pesar de que el ayuno es muy beneficioso para la salud, es considerado (por los musulmanes) principalmente como un método de autopurificación espiritual, pues el abstenerse por si mismo de los confortes de la vida terrenal, aunque sea por un tiempo corto, el ayunante crea una verdadera simpatía por aquellos que sufren el hambre, al mismo tiempo que crece en su vida espiritual.

5) El Peregrinaje a la Meca:

La peregrinación anual (Hayy) a la Meca es una obligación a cumplir una vez en la vida, para aquellos que tengan los medios físicos y financieros de realizarla. Cerca de dos millones de personas van a Meca todos los años de todos los rincones del planeta. A pesar de que Meca esta siempre llena de visitantes, el Hayy anual comienza en el duodécimo mes del calendario islámico. Los peregrinos varones visten vestimentas especiales y simples (dos piezas de tela) que hacen desaparecer cualquier tipo de distinción cultural o de clases. A manera de que todos se presenten ante Dios sin diferencias.

Peregrinos rezando en la mezquita del Haram en Meca

Peregrinos rezando en la mezquita del Haram en Meca. En esta mezquita se encuentra la Kaabah (la construcción negra en la imagen) hacia la cual los musulmanes se dirigen cuando rezan. La Kaabah es el lugar de adoración que Dios mando a los profetas Abraham y su hijo Ismael construir.

Los ritos del Hayy incluyen circunvalar la Kaabah siete veces, ir siete veces entre las dos montañas de Safa y Marwa tal y como lo hizo Hagar madre de Ismael (La paz sea con él) en busca de agua. Después los peregrinos se reúnen en Arafa4 para pedirle a Dios lo que deseen y para pedirle Su misericordia. La imagen de los creyentes con su blancas vestimentas, de pie en la montaña de Arafa pidiendo la misericordia divina nos recuerda cómo será el Día del Juicio.

El final del Hayy esta marcado por un festival; Eid-al Adha, que es celebrado con oraciones comunales. Este festival y el del Eid-al-Fitr, que marca el final del mes de Ramadán, son los principales festivales del calendario musulmán.


Notas de Pie:

(1) Para mayores detalles sobre la palabra Allah

(2) Narrado en Abu-Dawud, #4985, y Musnad Ahmad, #22578.

(3) El mes de Ramadán es el noveno mes del calendario islámico (que es lunar, no solar).

(4) Un área en las cercanías de Meca.

jueves, 12 de mayo de 2011

El proferta Muhammad consultaba los asuntos con sus mujeres






·La consulta del Profeta con sus mujeres:

· El Mensajero hablaba de los asuntos con sus mujeres como si fueran sus colaboradores y amigos. Seguramente él no necesitaba su consejo, ya que él fue conducido por la Revelación. Sin embargo, quería enseñar a su nación que los hombres musulmanes debían consultar a sus mujeres. Eso era una idea bastante radical en su tiempo, que incluso hoy en día lo es en muchas partes del mundo. Comenzó a enseñar a su gente a través de su propia relación con sus mujeres. Por ejemplo, las condiciones establecidas en el Tratado de Hudaybiya decepcionaron y enfurecieron a muchos musulmanes, ya que por una condición estipulada no iban a poder hacer la pereg­rina­ción aquel año. Ellos quisieron rechazar el tratado, ir a La Meca y enfrentarse con las posibles consecuencias. Pero el Mensajero les ordenó matar a sus animales de sacrificio y quitarse su atuendo de peregrino. Algunos Compañeros vacilaron esperando que él cam­biara de opinión. Él repitió su orden, pero ellos siguieron vaci­lando. Ellos no se opusieron al Profeta; más bien, todavía esperaban que él cambiara de opinión, ya que habían salido con la intención de peregrinar y no querían parar en mitad del camino. Al darse cuenta de esta renuncia, el Profeta volvió a su tienda y preguntó a Umm Salama, su esposa que le acompa­ñaba entonces, acerca de lo que ella pensaba sobre la situación. Entonces ella se lo dijo, totalmente consciente de que él no necesitaba su consejo. Al hacerlo, el Profeta les dio a los hombres musulmanes una importante lección social: en absoluto no hay nada incorrecto en el intercambio de ideas con las mujeres sobre los asuntos importantes o sobre cualquier otro tema. Ella dijo: ·¡Oh Mensajero de Allah! No repitas tu orden. Ellos pueden oponerse y así fallecer. Mata a tu animal de sacrificio y quítate tu atuendo de peregrino. Ellos obedecerán, por voluntad propia, cuando ellos ven que tu orden es definitiva.·[6] Él inme­diatamente tomó un cuchillo en su mano, salió y sacrificó a su oveja. Los Compañeros comenzaron a hacer lo mismo, ya que ahora estaba claro que su orden no cambiaría.

El consejo y la consulta, como cada buena acción, fueron practicados por el Mensajero de Allah primero dentro de su propia familia y luego en una comunidad más amplia. Incluso hoy, enten­demos tan poco acerca de la relación con las mujeres que es como si vagáramos sin rumbo fijo alrededor de una parcela de tierra, inconscientes del enorme tesoro sepultado bajo nuestros pies. Las mujeres son seres secundarios en las mentes de muchos, incluso de aquellos autoproclamados defensores de los derechos de la mujer así como de muchos hombres autoproclamados musulmanes. Para nosotros, una mujer es la parte que forma un todo, una parte que hace útil las otras partes. Creemos que cuando las dos mitades se unen, la unidad verdadera de un ser humano aparece. Cuando esta unidad no existe, la humanidad no existe-ni el hecho profético ni la santidad ni el Islam.

Nuestro maestro nos animó con sus iluminadas palabras a comportarse tiernamente con las mujeres. Él declaró: “Los creyen­tes más perfectos son los mejores de carácter y el mejor de vosot­ros es aquel que es más amable con su familia”.[7] Está claro que las mu­jeres han recibido el honor verdadero y el respeto que merecían, no solamente en teoría, sino en la práctica actual, sólo una vez en la historia-durante el período del Profeta Muhammad. ·El Mensajero de Allah dejaba decidir a sus mujeres.· Ellas podían decidir si quedarse con él o marcharse: ∙¡Profeta! Di a tus esposas: “Si queréis la vida del mundo y sus apariencias, venid que os dé algún provecho y os deje ir con toda delicadeza. Pero si queréis a Allah y a Su mensajero y la morada del Más Allá, es verdad que Allah ha preparado una inmensa recompensa para aquellas de vosotras que actúen con rectitud” (33:28-29).

∙Algunas de sus mujeres que deseaban una vida más próspera preguntaron: “¿No podríamos vivir con un poco más de lujo como los otros musulmanes? ¿No podríamos tener al menos un tazón de sopa diaria o algunas ropas más bonitas?” A primera vista, tales deseos podrían ser considerados justos. Sin embargo, ellas eran miembros de la familia que debía ser un ejemplo para todas las familias musulmanas hasta el Día del Juicio Final. El Mensajero entró en un período de decadencia física ya que se aproximaba su fin. La noticia se divulgó y todos se precipitaron hacia la mezquita y comenzaron a llorar. La pena más pequeña sentida por su querido Mensajero era suficiente para llevarlos a las lágrimas y hasta el incidente más pequeño en su vida los molestaría. Abu Bakr y Omar, viendo en el acontecimiento con una luz diferente ya que sus hijas estaban directamente implicadas, marcharon apresuradamente a la mezquita. Quisieron verlo, pero él no los dejó entrar. Final­men­te, en su tercer intento, consiguieron entrar y comenzaron a rep­render a sus hijas. El Mensajero vio lo que pasaba, pero sólo dijo: “No puedo permitir lo que ellas quieren”.[8] El Corán dec­lara: ·¡Mujeres del profeta! Vosotras no sois como cualquier otra mujer (33:32).

·Las otras podrían salvarse simplemente realizando sus obligaciones, pero ellas que estaban en el mismo centro del Islam tenían que dedicarse totalmente, de modo que ninguna debilidad apareciera en el centro. Había ventajas en ser la esposa del Profeta, pero estas ventajas traían responsabilidades y riesgos potenciales. El Mensajero las preparaba como ejemplos para todas las mujeres musulmanas del presente y del futuro. Él estaba especialmente preocupado de que ellas disfrutaran de la recompensa por sus buenas acciones en este mundo y así estar incluidas en:
·Habéis consumido las cosas buenas que tuvisteis en vuestra vida terrenal (46:20)·

. La vida en la casa del Profeta era incómoda. Por eso, sea de manera explíci­ta­ o implícita, sus mujeres hicieron algunas mo­destas peticiones. Como su posición era única, no esperaban de ellas divertirse en un sentido terrenal. Algunas personas piadosas se ríen sólo unas veces durante sus vidas; las otras nunca llenan sus estómagos. Por ejemplo, Fudayl ibn Iyad nunca se rió en toda su vida. Sólo una vez sonrió y aquellos que vieron hacerlo le preguntaron por qué había sonreído, ya que estaban enormemente sorprendidos. Él les dijo: “Hoy me he enterado de que mi hijo Ali murió. Me puse feliz al oír que Allah lo amaba y entonces sonreí”.[9] Si había tal gente fuera de la casa del Profeta, sus mujeres, que eran aún más piadosas y respetuosas a Allah y consideradas como “las madres de los creyentes” deberían estar seguramente en el más alto grado. No es fácil merecer estar junto con el Mensajero en este mundo y en el Más Allá. Así, estas mujeres especiales fueron sometidas a una gran prueba. El Mensajero permitió que ellas eligie­ran su pobre casa o los lujos de este mundo. Si ellas elegían el mundo, él les daría todo lo que quisieran a ellas y luego anularía su matrimonio con ellas. Si elegían a Allah y a Su Men­sajero, tenían que ser felices con sus vidas. Eso era una peculiaridad de su familia. Ya que esta familia era única, sus miembros tenían que ser únicos. El cabeza de la familia fue elegido, como las mujeres y los niños.

El Mensajero primero llamó a Aisha y le dijo: “Quiero hablar de algo contigo. Debes hablar con tus padres antes de tomar una decisión”. Después recitó los versos mencionados anteriormente. Su decisión fue exactamente lo esperado de la hija sincera de un padre sincero: “Oh Mensajero de Allah, ¿necesito hablar con mis padres? Juro por Allah que elijo a Él y a Su Mensajero”.[10] Aisha nos cuenta lo que pasó después: “El Mensajero recibió la misma respuesta de todas sus mujeres. Nadie expresó alguna opinión diferente. Todas ellas dijeron lo que yo había dicho”. Ellas hicieron esto porque todas ellas le apoyaban. Si el Mensajero les hubiera dicho que ayunaran toda su vida sin romper dicha promesa, lo habrían hecho y lo habrían soportado con placer. Algunas de sus mujeres habían disfrutado de un modo de vida extravagante antes de su matrimonio. Una de ellas era Safiyya, quién había perdido a su padre y marido, y había sido tomado prisionera, durante la Batalla de Jaybar. Ella debía estar muy enojada con el Mensajero, pero cuando lo vio, sus sentimientos cambiaron completamente. Soportó el mismo destino que las otras mujeres. Lo soportaron porque el amor del Mensajero había penetrado sus corazones. Safiyya era judía. Una vez, se quedó consternada cuando le mencionaron esa realidad con ironía. Ella le informó al Mensajero sobre este asunto expresando su tristeza. Él la consoló diciéndole: Si lo repiten diles: ·Mi padre es el Profeta Aarón, mi tío es el Profeta Moisés y mi marido es, como ya sabéis, el Profeta Muhammad, el Elegido. ¿Tenéis algo más que yo para estar orgullosos?[·11] El Corán declara que sus mujeres son las ·madres de los creyentes (33:6)·. Aunque han pasado catorce siglos, aún disfrutamos de decir “mi madre” cuando nos referimos a Jadiya, Aisha, Umm Salama, Hafsa y sus otras mujeres. Sentimos esto por el amor a él.

Algunos las quieren más que a sus madres reales. Ciertamente, este sentimiento debió ser muy profundo y fuerte en los tiempos del Profeta. El Mensajero fue un perfecto cabeza de familia. Tratándolas por igual, siendo un amante de sus corazones, un instructor de sus mentes, un educador de sus almas. El Mensajero sobresalió en cada campo de la vida. La gente no debería compararlo consigo mismo ni con las supuestas grandes personalidades de su tiempo. Los investigadores deben considerarlo como alguien a quien los ángeles están agradecidos, siempre recordando que él sobresalió en todos los aspectos. Si ellos quieren saber sobre Muhammad deben buscarlo en sus propias dimensiones. Nuestra imaginación no puede alcanzarle, ya que ni siquiera sabemos imaginar correctamente. ¡Que la paz sea con él!


[6] Bujari, “Shurut” 15.
[7] Abu David, “Sunna”, 15; Tirmizi, “Rada” 11.
[8] Muslim, “Talaq” 34,35.
[9] Abu Nuaym, Hilyat al-Awliya, 8:100.
[10] Muslim, “Talaq” 35.
[11] Tirmizi, “Manaqib” 64

lunes, 9 de mayo de 2011

DOCUMENTAL: La guerra que usted no ve

Documental de John Pilger que muestra el rol de los medios en la manipulación de la información en beneficio de los intereses del imperialismo y de las grandes empresas transnacionales.

LA VERDAD SOBRE EL 11-S. VIDEO DOCUMENTAL



Con argumentos científicos en la mano, un grupo de personas de primera línea mediática perteneciente a diferentes ámbitos: Giulietto Chiesa (Europarlmentario), Dario Fo (Premio Nobel de literatura), Gore Vidal (Escritor americano) o Andreas von Bülow (ex-ministro de defensa alemán) entre otros, desgranan los hechos punto por punto desmontando las inconsistencias de la versión oficial.

La diferencia de este documental con respecto a otros de la misma temática, aparte del doblaje y no la subtitulación del film, es que por primera vez un grupo de la vanguardia social demanda una nueva investigación de los hechos. No son los únicos, en una encuesta de la CNN, se concluye que nada menos que el 84% de la población Estadounidense cree que el gobierno de los EE.UU. ha ocultado los verdaderos acontecimientos del 11-S

La farmacia de Al Ándalus


El Miswak es un palillo de color canela, de un palmo de longitud y del grosor de un dedo, que se usa desde tiempo inmemorial para el cuidado de los dientes y la higiene bucal.

Conocido en Oriente Medio y Asia desde épocas remotas, se usaba para cepillar y limpiar los dientes mucho antes de la llegada del Islam. En verdad, los Hadiz de nuestro amado Nabi Muhammad indican que el Miswak fue la Sunna o práctica de todos los Ambiya (Mensajeros de Allah).

En la actualidad los supermercados y farmacias de la mayoría de los países islámicos no venden el Miswak, pero puede encontrarse en la mayoría de las tiendas islámicas de suministros, entre los vendedores callejeros de los zocos o enfrente de las mezquitas.

El uso del Miswak parece estar totalmente limitado al hombre, por razones no muy claras, y también es más popular en la generación antigua que entre los jóvenes.

El Miswak tiene numerosas ventajas sobre otros medios más convencionales de higiene oral. Por su contenido en antisépticos no necesita limpieza, y debido a que sus fibras son paralelas al mango (y no perpendiculares como las de un cepillo dental), se pueden introducir más fácilmente entre los dientes que un cepillo de dientes convencional. También en contraste con éste puede usarse en cualquier momento y lugar, y permite prescindir completamente de la necesidad de usar pastas dentífricas, llenarse la boca de agua y escupir.

Características externas del Miswak
El Miswak no debe ser más largo de un "palmo" (unos 15-20 cm), es decir, la distancia entre la puntas del dedo pulgar y el meñique con la mano completamente abierta, y no debe ser más grueso que la anchura de un dedo.

El Miswak debe ser lo más recto posible, y no demasiado rugoso.

El Miswak no debe estar demasiado duro (seco) ni demasiado blando. Si está muy seco se debe sumergir varias horas en agua (o mejor aún en 'agua de rosas') antes de usarlo.

Preparación del Miswak
Después de adquirido se debe remojar unas cuantas horas en agua para ablandarlo. Una vez blando se separan unos 2cm de corteza de uno de sus extremos con un cuchillo afilado, exponiendo la médula blanca interior. A continuación se mastica ésta hasta que sus fibras se separen y se vuelvan suaves como un cepillo.
Modo de empleo

1- Niyyat (intención).

2- Enjuagar tres veces la boca antes de usarlo.

3- Lavar el extremo del Miswak bajo agua corriente.

4- Sujetar el Miswak horizontalmente con la mano derecha, de tal manera que el meñique y el pulgar estén debajo y los demás dedos en la parte superior.

5- Comenzar cepillando los dientes superiores, desde el lado derecho hasta el lado izquierdo de la boca. Cepillar después los dientes inferiores en el mismo orden. Las caras externas primero, luego las internas y por último las superficies oclusales (cara superior). Un total de 3 veces en cada zona de los dientes, y entre cada una de ellas (y al final) limpiar el Miswak con agua.

Las piezas dentarias se limpian frotando el Miswak desde el borde de las encías hacia el filo cortante de los dientes. La lengua se debe frotar a lo largo y en toda su extensión.

Una señal de que los dientes han sido bien limpiados es cuando "chirrían" al frotarlos con el Miswak.

6- Al final lavar el Miswak con agua y guardarlo en posición vertical, con el extremo del cepillo hacia arriba.

b) Adab (cortesía) y recomendaciones para el buen uso del Miswak

1- El Miswak no debería usarse estando acostado, excepto en caso de necesidad.

2- El Miswak no se debe chupar.

3- El Miswak no debe ser arrojado al suelo.

4- El Miswak no se debe utilizar por ambos extremos.

5- El Miswak no debe hacerse de un árbol desconocido o que pueda ser venenoso.

Composición y propiedades

Los análisis químicos del Miswak extraído del árbol Arak (Salvadora persica) revelan que contiene un total de 19 substancias que son beneficiosas para la salud dental. Entre ellas se encuentran:

1) Antisépticos naturales de acción bactericida que destruyen los micro-organismos perjudiciales de la boca, los cuales si no se controlan favorecen la formación de placa dental, aparición de sarro y caries.

2) Ácido Tánico, con cualidades astringentes que refuerzan las encías y las protegen de enfermedades como la gingivitis (inflamación) y la eventual formación de abscesos bajo las raíces de los dientes careados.

3) Aceites esenciales aromáticos que incrementan la salivación, lo cual ayuda a limpiar la boca (y de esta forma prevenir la caries) y al proceso de la digestión.

4) Trimetil-amina.

5) Alcaloide Salvadorina.

6) Vitamina C.

7) Sales minerales: cloruros y fluoruros.

8) Minerales: Azufre, Fósforo, Calcio y, sobre todo, Silicio.

9) Cantidades variables de saponinas, flavonoides y esteroides.

Beneficios bucales

1- Limpia la boca y los dientes, mecánica y microbiológicamente.

2- Previene la caries, y la extensión de las que ya estén establecidas.

3- Fortalece las encías, les da firmeza y solidez.

4- Remueve eficazmente la placa dental y previene su formación.

5- Blanquea los dientes (les quita el color amarillento).

6- Elimina el mal aliento.

7- Mejora el sentido del gusto.

8- Aclara la voz.

Beneficios Fisiológicos

1- Ayuda a la digestión.

2- Mejora la vista.

3- Agudiza la memoria y la inteligencia.

4- Cura ciertos dolores de cabeza.

5- Mejora la salud en general y da buen color al rostro del que lo usa con regularidad.

Sustitutos del Miswak

En el caso de no disponer de Miswak se puede sustituir por:

1) Los dedos. Los dedos índice y pulgar de la mano derecha se pueden utilizar para limpiarse los dientes. Este método sirve en caso de necesidad al propósito del Miswak en cuanto a la recompensa (Sawaab) se refiere, siempre que sea precedido por la Niyyat (intención).

Imam Tahtaawi dijo: "La recompensa prometida puede obtenerse en el caso de no estar disponible el Miswak, pero no en el caso de su disponibilidad".

"Cepilla los dientes con el dedo índice y el pulgar" ( Muheet )

2) Un trozo de Tela . Una pieza de tela ordinaria (bien limpia) puede usarse en caso de no disponer de Miswak.Los que no tengan dientes también pueden usar los dedos o una tela como substitutos del Miswak y de esta forma obtienen el Sawaab (recompensa). Pero para ello deben realizar el Niyyat (intención).

3) Cepillo de dientes . Si el cepillo de dientes está hecho de cerdas (pelo de cerdo o jabalí) su uso no está permitido. Si es de fibras sintéticas es aceptable. No obstante, el cepillo de dientes no sirve como un substituto en el caso de que el Miswak esté disponible. Lo mismo se aplica a la pasta dentífrica y a cualquier otra manera de limpiarse los dientes. Esto es así, entre otras cosas, porque ya en tiempos de nuestro Profeta existían substitutos de este tipo, pero él nunca los equiparó con el Miswak.

Clases de Miswak

Está permitido hacer un Miswak con cualquier tipo de árbol excepto de aquellos que sean dañinos o venenosos. En la tradición islámica por ejemplo se citan las siguientes plantas como no aconsejables para el Miswak: Granado, Arrayán, Bambú y Jazmín.

Por el contrario los siguientes tipos de árboles son los más recomendados (en orden de importancia):

- Salvadora Pérsica.Conocida con los nombres de:Arak , Lirak , Siwak (lengua Árabe); Pilu (en Urdu, en India y Pakistán);Aferchi (en el Sahara, Mauritania sobre todo); Toothbrush tree (en lengua inglesa)

- Olea europea (Olivo)

- Azadarachta Indica (Bitam , Nim , Margosa)

- Juglans Regia (Nogal , Djouz , Gerga' , Sowak)

- Maerua crassifolia (Sarkh , Sarha , Sarah). Del Sahara occidental.

- Cualquier árbol de sabor áspero (astringente) o amargo.

Miswak de Arak (Salvadora Persica)

"Y el mejor de los Miswaks es el de Arak, después el de Olivo" (Kabiri)

El mejor tipo de Miswak es el que está hecho del árbol Arak. En el libro "Ta-hilul Mana-fi" se dice que el Miswak de Arak es excelente para dar brillo y resplandor a los dientes.

En el libro "Mawahib" se expone que los compañeros del Imam Shafi llegaron al consenso de que el hecho de usar el Miswak de Arak es Sawab (recompensa) si se mantiene.

Abu Hanifa dijo: "es el mejor de los árboles cuyas ramitas son usadas para cepillarse los dientes".

Abu Ziyad dijo: "de él se hacen los palillos de dientes, y la mejor parte es de las raíces".

Ibn Shamil dijo: "el Arak es un árbol alto y delgado con muchas ramas y hojas, de madera floja, que crece en depresiones y hondonadas. Los Miswaks se hacen de él, y es uno de los árboles agrios". (Lisan-al-'Arab, 268)

Descripción botánica:

Es un árbol pequeño o un arbusto grande, de 1 a 3 metros de altura, tronco encorvado rara vez de más de un pié de diámetro, corteza rugosa y agrietada, blanquecina, con ramas descendentes. Se agrupa a menudo formando matorrales. Hojas de 2-5 x 1-2 cm , elípticas o lanceoladas, naciendo en parejas (opuestas). Flores pequeñas, de 3mm de diámetro, agrupadas en panículos racemosos en el extremo de las ramas, aromáticas. Fruto globoso, de 4-6 mm de diámetro, carnoso, de color rojo en su madurez. La corteza de la raíz es de color castaño claro y en su superficie interior blanca, de olor similar al Berro y sabor fresco y picante.

Dónde se encuentra:

En una franja geográfica que podemos dividir en tres zonas bien definidas:

- Zona Sahariana (N. de Africa): Mauritania, Argelia, Chad, Libia, sur de Egipto y Sudán.

- Oriente Medio (Arabia Saudí, etc...).

- Asia: desde Persia (de donde toma nombre la especie) hasta las zonas occidentales de la India (la variedad S. indica).

- Prefiere las arenas de la costa y las depresiones de los wadis (ríos secos del interior).

Para hacer Miswak se utilizan sus ramas y raíces más delgadas, frescas o semisecas. Las raíces se consideran lo mejor.

Miswak de Olivo

Rasulullah tuvo en gran aprecio el Miswak hecho con este árbol. El siguiente Hadiz nos muestra la importancia de este Miswak: "Usa el Miswak del árbol de Olivo. Es el Miswak de un árbol Mubarak (gracioso o auspicioso). Purifica y hace saludable la boca. Y remueve la capa amarillenta de los dientes. Él es mi Miswak y el Miswak de los Ambiya (Profetas) que vinieron antes de mí" (Muntakhab)

Corteza de Nogal

En Marruecos y otros países se utilizan cintas de corteza (de la raíz o parte inferior del tronco) de Nogal para limpiar y blanquear los dientes, enrojecer los labios y encías, combatir el mal aliento, la gingivitis y la piorrea.

La corteza se remoja en agua y se frota sobre los dientes y encías para limpiarlos. Ello confiere un tinte rojizo a los labios y encías que los hace atractivos, además de blanquear eficazmente los dientes.

La corteza se llama Bambar en Arabia Saudí y Dandasa en Pakistán. En Marruecos recibe el nombre de Sowak.

Y con esto acabamos la primera parte de este artículo dedicado al Miswak. En el siguiente profundizaremos en su aspecto religioso vinculado al Islam, en los numerosos hadices y tradiciones que tratan de él, en definitiva, trataremos de aquellos aspectos más íntimos para los musulmanes y que por falta de espacio no he podido tocar aquí. Espero que no falten a la cita.

Fuente: Camino al Islam.

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miércoles, 4 de mayo de 2011

El trato a la mujer musulmana

El trato a la mujer musulmana no solamente ha sido mencionado en algunas ayat (versículos) del Corán, sino que también fue mencionado más de una vez por el Profeta sallallahu allayhi wasallam (la paz y las bendiciones de Allah sean con él) como se reporta en varios hadices:

· Abu Huraira radiyallahu anhu (que Allah esté complacido con él) cuenta que Rasulullah (apóstol de Allah) sallallahu allayhi wasallam dijo: “Ningún musulmán debe enfadarse con su mujer. Si alguna de sus cualidades os disgustan, habrán muchas otras cualidades que merecen vuestro aprecio.” (Nail al-Autar).

· Otro hadiz relata: “El más perfecto en fe de entre los creyentes es aquel que es el más bondadoso y trata mejor a su esposa y a sus hijos.”

· Abu Huraira radiyallahu anhu dijo que el Mensajero de Allah sallallahu allayhi wasallam: "Os aconsejo que os relacionéis bien con las mujeres, ya que verdaderamente la mujer fue creada de una costilla y la parte más torcida de la costilla es su cabeza. Si tratas de enderezarla, la rompes y si la dejas, sigue estando torcida. Os aconsejo pues, en el buen comportamiento con las mujeres." (Al Bukhari y Muslim)

· El Mensajero sallallahu allayhi wasallam dijo: “En verdad el mejor de entre ustedes es el mejor con su mujer y yo, soy el mejor de entre ustedes con mis mujeres.” (Al-Hur Al-Amili, vol. 7 p. 122)

· Bahz b. Hakim radiyallahu anhu informó: "Yo le pregunté al Profeta sallallahu allayhi wasallam sobre su enseñanza con respecto a la mujer y el Profeta sallallahu allayhi wasallam me replicó: “Alimentadlas como os alimentáis a vosotros mismos, vestidlas como os vestís vosotros mismos y no la regañéis ni la golpeéis.”(Kanz al-Ummal)

· Abu Hurairah radiyallahu anhu contó que un hombre fue hacia el Mensajero de Allah sallallahu allayhi wasallam y dijo: “¡Oh Mensajero de Allah! ¿De toda la gente, a quién le corresponde el mayor derecho a que se le haga el bien y se le dé compañía?’ Dijo: ‘A tu madre.’ Y dijo: ‘Después ¿a quién?’ Dijo: ‘A tu madre.’ Y dijo: ‘Después ¿a quién?’ Dijo: ‘A tu madre.’ Y dijo: ‘Y después ¿a quién?’ Dijo: ‘A tu padre’.” (Al-Bukhari, 5626; Muslim, 2548)

· Abu Huraira radiyallahu anhu cuenta que Rasulullah sallallahu allayhi wasallam dijo: "Si una persona tiene tres hijas a las cuales mantenga y eduque, Allah le recompensará con el Jannah(paraíso)". (Kanz al-Ummal)

· Aisha radiyallahu anha (que Allah esté complacida con ella) cuenta que Rasulullah sallallahu allayhi wasallam dijo: "Todas las mujeres son agradables rosas". (Kanz al-Ummal)

Como hemos visto, tanto los dichos como el ejemplo del Profeta sallallahu allayhi wasallam nos han mostrado el verdadero trato al que tiene derecho la muslimah (musulmana) sea como madre, hija, esposa y mujer en general.